Existen
diversos grupos de estampillas, entre los cuales destacan tres de
ellos: el de las permanentes, el de las conmemorativas y el de las
especiales, mismas que a continuación se describen:
Permanentes:
Denominadas también como "comunes", "ordinarias",
"de uso corriente" o "definitivas". Tienen la
función fundamental de cubrir las necesidades del mercado para el
pago de porte de la materia postal, tienen un tema común y sus
diseños guardan una misma línea, son impresas en grandes cantidades
y reimpresas cada vez que las necesidades de los correos y la
implantación de una nueva tarifa postal lo requieran.
Conmemorativas:
Se emiten con motivo de un acontecimiento de gran interés, una
efeméride, o para exaltar a personajes célebres; su impresión es
limitada y por una sola ocasión.
Especiales:
Se emiten cada año sin llegar a ser una conmemoración, o bajo una
temática determinada.
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